Última actualización 2 octubre, 2024 por Alberto Llopis
Desde su independencia en 1991, Croacia ha sorprendido al mundo del fútbol con una rápida y notable evolución, destacando en competiciones internacionales como la Copa del Mundo. Con un tercer lugar en 1998 y un subcampeonato en 2018, esta selección se ha ganado su lugar entre las grandes potencias del fútbol, a pesar de su corta historia y las complejidades sociales que ha enfrentado.
El 17 de octubre de 1990, un equipo formado por jugadores croatas se enfrentó a Estados Unidos en Zagreb, en lo que sería un símbolo del cambio que estaba por llegar. Poco después, el 8 de octubre de 1991, Croacia declaró su independencia de Yugoslavia en un contexto marcado por tensiones geopolíticas y conflictos étnicos que desencadenaron las Guerras Yugoslavas. Estas guerras dejaron un saldo de aproximadamente 140 mil víctimas, según estimaciones no oficiales.
A pesar de las dificultades, Croacia encontró en el fútbol una vía para proyectarse internacionalmente. Vestida con su distintiva camiseta a cuadros rojiblanca, la selección croata comenzó su trayectoria como una promesa del fútbol mundial.
El rápido ascenso en el fútbol internacional de Croacia
Reconocida por la FIFA y la UEFA en 1992, Croacia no participó en las Eliminatorias para el Mundial de 1994. Sin embargo, su debut en un torneo importante llegaría en la Eurocopa de 1996, donde sorprendió al llegar a los cuartos de final. Esta actuación fue solo una advertencia de lo que estaba por venir en la Copa del Mundo de 1998 en Francia.
En su primera participación mundialista, Croacia mostró un nivel impresionante. Clasificada como segunda en su grupo, solo por detrás de Argentina, avanzó eliminando a selecciones de gran calibre como Rumanía y Alemania. Aunque cayó ante Francia en semifinales, logró asegurar el tercer puesto tras vencer a Holanda. Esta actuación posicionó a Croacia como una nueva potencia en el fútbol, liderada por jugadores como Davor Suker, quien se convirtió en un ícono del equipo.
Croacia en Rusia 2018: Una nueva generación
Tuvieron que pasar 20 años para que Croacia volviera a ser protagonista en un Mundial. En Rusia 2018, impulsada por una generación que creció en medio de los horrores de la guerra, Croacia logró superar todas las expectativas. Liderada por Luka Modric, el equipo venció a Nigeria, Argentina e Islandia en la fase de grupos. Posteriormente, eliminó a Dinamarca, Rusia e Inglaterra en un emocionante camino hacia la final.
A pesar de caer nuevamente ante Francia, esta vez con un 4-2 en la final, Croacia demostró que su éxito no era fruto de la casualidad. Esta generación de jugadores, muchos de los cuales tuvieron que huir de sus hogares durante la guerra, mostró una resiliencia y determinación que les permitió alcanzar el subcampeonato del mundo.
Catar 2022: La consolidación de Croacia
Croacia continuó destacando en el Mundial de Catar 2022, donde dejó en el camino a Brasil, uno de los grandes favoritos del torneo. Tras empatar con Bélgica y Marruecos en la fase de grupos, y vencer a Japón en octavos de final en una dramática tanda de penaltis, los croatas volvieron a posicionarse como una selección temida en el panorama internacional. Finalmente cayeron en semifinales y le ganaron el partido por el tercer y cuarto puesto a Marruecos, la sorpresa de ese Mundial.
¿Qué hace a Croacia tan especial?
La capacidad de Croacia para competir al más alto nivel no es casualidad. Según el Centro Internacional de Estudios Deportivos, Croacia es el tercer país con mayor exportación de futbolistas per cápita, con un promedio de 4.6 jugadores por cada 500 mil habitantes. Esta cifra solo es superada por Islandia y Montenegro.
Además, Croacia cuenta con una rica tradición futbolística heredada de su pasado en Yugoslavia. Bajo el régimen socialista, la práctica deportiva era obligatoria desde la infancia, lo que permitió el desarrollo de un sólido sistema de academias.
Este enfoque, combinado con la experiencia de crecer en un entorno marcado por la guerra, ha forjado una mentalidad de lucha y perseverancia en sus jugadores, como bien lo describió Luka Modric, uno de los mejores jugadores de la historia de Croacia, en su autobiografía Mi Partido.
Los resultados les avalan. En 6 participaciones en Copa del Mundo han llegado a 1 final quedando subcampeones del mundo (2018) y otras 2 veces han quedado terceros (1998 y 2022)
Croacia en torneos internacionales:
- Eurocopa 1996 – Cuartos de final
- Copa del Mundo 1998 – Tercer lugar
- Copa del Mundo 2002 – Fase de grupos
- Eurocopa 2004 – Fase de grupos
- Copa del Mundo 2006 – Fase de grupos
- Eurocopa 2008 – Cuartos de final
- Copa del Mundo 2010 – No clasificó
- Copa del Mundo 2014 – Fase de grupos
- Eurocopa 2012 – Fase de grupos
- Eurocopa 2016 – Octavos de final
- Copa del Mundo 2018 – Subcampeón
- Mundial de Catar 2022 – Tercer puesto
- Eurocopa 2024– Primera ronda
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