Última actualización 13 enero, 2015 por Alberto Llopis
Como todos esperábamos, Cristiano Ronaldo ganó el pasado lunes, 12 de enero, el Balón de Oro que lo acredita como el mejor jugador del mundo en el año 2014. Parecía imposible que el lusitano no ganara el galardón, tras romper el record de goles marcados en una temporada con 61 dianas y ganar la Champions, la Copa del Rey, y el Mundial de Clubes con el Real Madrid. Sin importar con quien compitiera, el “7” merengue tenía los méritos para ganarlo, tal como sucedió.
En la acera del frente, quedaron Lionel Messi y Manuel Neuer con 15,76% y 15, 17%, respectivamente. Para el argentino no fue buen año. Más allá de jugar la final del mundial y haber sido elegido como mejor jugador de la Copa del Mundo, el “10” del Barcelona no deslumbró como es costumbre. Muchos eran los rumores de que Messi estaba bajo de forma, y sus extraños y reiterativos inconveniente con vómitos aumentaron el bullicio.
Aunque el rosarino anotó 41 goles la pasada campaña, fue opacado por la gran temporada del Real Madrid y Cristiano Ronaldo, además de que fue un año en blanco para el Barcelona, y tampoco pudo quitarse de encima el fantasma de Maradona levantando la Copa del Mundo. Para Messi, fue un año gris, y el amargo sabor del Balón de Plata es la última estocada de un año que no querrá recordar.
Finalmente, Manuel Neuer, el mejor portero de la actualidad, no pudo lograr la gesta que una vez consiguió su colega bajo los tres postes en 1963: Lev Yashin. El alemán fue una garantía en el arco para que su selección ganara el Mundial, y nadie duda que es el mejor portero, pero a fin de cuentas, los goles se quedan en la memoria, no así las tapadas que fácilmente se olvidan. Y, finalmente, al igual que Messi, Neuer fue otra víctima de Cristiano Ronaldo y su devastador record de goles, por lo que se tuvo que conformar con un amargo Balón de bronce.