Última actualización 5 abril, 2024 por Alberto Llopis
Nicolae Manea, un entrenador rumano curtido en mil batallas, perdió el sentido común durante el partido que enfrentaba a su equipo contra el Pandurii, perteneciente a la Liga rumana.
Descontento ante la decisión arbitral, que además derivó en gol en contra para su equipo, lanzó una de las camillas para los lesionados al terreno de juego, ante la sorpresa de todos los allí presentes.
El arbitro, obviamente, tuvo que detener el partido y expulsó al veterano y irascible entrenador, que no dudo en encararse con el colegiado e incluso empujar a miembros de su cuerpo técnico que intentaban retenerle, ante el estado de nerviosismo que presentaba.
El entrenador al final, abandonó el campo de muy mala gana y haciendo aspavientos. La locura de Manea afortunadamente no tuvo consecuencias al no impactar la camilla contra ningún jugador.