Última atualização 13 abril, 2024 por Alberto Llopis
Alemania y Suecia empataron a cuatro goles en uno de los mejores partidos que se recuerdan en la historia de las fases de clasificaciones de un Mundial después de que los escandinavos fueran perdiendo 4-0 en el minuto 65.
Alemanha 4 Suécia 4: Una oda al fútbol de ataque
Los alemanes salieron en el primero momento mostrando un fútbol muy rápido, recurriendo a muchas combinaciones cerca del área sueca y logrando llegar sin mucha dificultad por las dos bandas. Ya en el minuto 2 los alemanes tuvieron la primera oportunidad clara, con un remate de zurda de Thomas Müller que se estrelló contra el poste.
Esa llegada no fue fruto de la casualidad sino era un resultado lógico de la forma como se estaba presentando el partido. Pese a una llegada fortuita sueca en el minuto 5 -un remate de Holmen desde fuera del área por encima de la portería- era claro que quien mandaba en el campo era Alemania.
El balón circulaba en la mitad sueca y el gol parecía cuestión de tiempo. No se necesitó mucho. Ya en el minuto 9 llegó el primero cuando Klose definió con un remate de zurda desde unos seis metros a centro de Marco Reus. Seis minutos después se repitió la misma fórmula: centro de Reus, otra vez desde la izquierda, remate de Klose y Alemania pudo celebrar el segundo. Tras el segundo gol, hubo una fase en la que Suecia mostró cierta reacción y Alemania bajó un poco el ritmo pero ello no duró mucho.
No minuto 38, hubo una doble ocasión para Reus y el madridista Mesut Özil y en el 39 llegó el tercero, por intermedio del defensa Per Mertesacker que marcó con un remate con la pierna derecha dentro del área tras recibir un pase de cabeza de Müller. Al comienzo del segundo tiempo, Suecia hizo un intento por sacudirse la clara superioridad alemana adelantando sus líneas y tratando de presionar a los Joachim Löw en su propia mitad.
No minuto 56 fue Müller quien habilitó a Özil, con un centro desde la derecha, y el madridista no falló y marcó el cuarto con un zurdazo al segundo poste. Los esfuerzos ofensivos de los suecos no cesaron y serían recompensados, en el minuto 62, con un gol de cabeza Zlatan Ibrahimovic, a centro de Källström (4-1).
La espectacular remontada de la Suecia de Zlatan Ibrahimovic
El gol parecía ser sólo el de la honra pero apenas dos minutos después vino el segundo para Suecia por intermedio de Lustig. Con los dos goles en dos minutos un partido, que parecía liquidado, volvió a estar súbitamente abierto. Los suecos no sólo habían recortado la distancia sino que habían recibido una inyección de moral que hacía pensar que una remontada era posible.
Alemanha, que tras el 4-0 parecía haber bajado su rendimiento a media máquina, tuvo que despertar una vez más. Una ocasión de Toni Kroos en el 69, con un remate al que Isaakson reaccionó con una buena parada. Esto fue una señal importante para los de Löw.
Porém, el partido estaba abierto, los suecos mostraban fe y voluntad e Ibrahmovic, de quien no se habían tenido noticias en la primera parte, había empezado a mandar en el campo. Além do mais, la defensa alemana hacía agua por todas partes en cada avance sueco. Nele 76 fue Elmander el que marcó el tercero para los suecos para darle paso a un cuarto de hora final lleno de tensión.
Alemania no corrió el riesgo de tratar de administrar el gol de ventaja. Buscó el quinto y tuvo dos ocasiones en remates desde fuera del área. De Kroos, nele 82 contra el poste, y de Özil, nele 83 por encima de la portería. Suécia, por sua parte, estuvo muy cerca del empate en el 85. Kakanalik remató por encima cuando la portería estaba vacía después de que Manuel Neuer perdiera un mano a mano con Ibrahimovic.
Cuando todo parecía liquidado, en la última jugada del partido, llegó el gol del empate. Ibrahimovic le ganó un duelo aéreo a Mertesacker (haciéndole posiblemente falta). El balón le cayó a Elm que derrotó a Neuer de fuerte disparo. Culminando así, un remontada realmente histórica para los suecos.