Última atualização 20 Julho, 2020 por Alberto Llopis
Su nombre real respondía a Alhaji Momodo Nije, aunque en realidad todo el mundo le llamaba Biri-Biri. Muchos, especialmente los más jóvenes, no lo conocerán pero su importancia es tal que estamos hablando de una leyenda del fútbol africano, sevillista, dos anos 70, que durante muchos años cautivó a miles de personas en el Sánchez Pizjuán y en los campos españoles que pisó.
Biri-Biri fue un futbolísta atípico que rompió todos los moldes habidos y por haber. LLegó en 1973 al Sevilla procedente del fútbol danés tras previos pasos por la liga de Gambia (su país) y el Derbi County inglés entrenado por Brian Clough. Su arribada a tierras sevillanas fue observada con curiosidad. Se trataba del primer jugador africano que había sido profesional, que había jugado en Dinamarca y el primer futbolista negro que debía vestir la camiseta del equipo de Nervión.
Biri-Biri, el inicio de una leyenda para el Sevilla
Muy fuerte físicamente, rápido y con gran capacidad para moverse por varias zonas del ataque, Biri-Biri no era un jugador especialmente habilidoso con la pelota ni un gran regateador. Sino más bien un pulmón que se ganaba a la afición con su despliegue físico, su lucha y su garra. Então, por cinco anos, el tiempo que permaneció en el Sevilla, donde dejó una gran huella y fue elevado a la categoría de ídolo e incluso, de personaje de culto que hizo que hasta una peña adoptara su nombre (los Biris).
Cinco años repletos de particularidades, de excesos, como esos continuos viajes a Gambia que le hacían saltarse entrenamientos, como esas carreras por la banda que acababan en entradas duras de los rivales (“al negro dadle sin miedo que no se ven los moratones”, se solía decir) o como esos fallos inexplicables que combinaba con goles o acciones brillantes.
Cinco temporadas inolvidables, que sirvieron para ascender al Sevilla, para dejar su rastro en la Segunda División y también en la Primera y dicho sea de paso, para ser un gran embajador de su país. Porque Biri-Biri se convirtió en ese tiempo en el mejor futbolista de Gambia de la historia, en el único futbolista de Gambia en haber jugado la Liga y en todo un santo y seña para una afición que vitoreaba a ese morenito que antes de ser sevillista había tenido un devaneo con el Betis, club que afirmaba tener un precontrato.
Retirada y fallecimiento el 19 de julio de 2020
Su huida al fútbol danés se produjo en 1978, donde permaneció tres años más antes de volver a su país y dar por zanjada una carrera de más de de 24 años como internacional. De más de 24 años marcando un antes y un después en Gambia, país donde se retiró a vivir y trabajó de consul. Ele 19 de julio de 2020 fallecía Biri-Biri, dejando paso así a la leyenda para los hinchas del Sevilla.