Última atualização 28 outubro, 2019 por Alberto Llopis
El FC Barcelona ha demostrado tener capacidad para sobreponerse a un arranque dubitativo, cuando no francamente malo, que le llevó a dejarse ocho puntos en las cinco primeras jornadas. Lo que se auguraba como la catástrofe de un proyecto fallido, se ha convertido en una apuesta de éxito tras encadenar cuatro victorias consecutivas. El Barça de Valverde se vuelve a situar como favorito para hacerse con el título de LaLiga Santander en su edición 2019-20, sensación que se acentúa más si observamos la situación del eterno rival, el Real Madrid. E é que, aunque parece que la propuesta de Zinedine Zidane parecía haber empezado a arrancar, los del Bernabéu todavía tienen que demostrarse como candidatos sólidos.
DE LA DECEPCIÓN A LA EUFORIA
Y es que los culés, superados los varapalos de las derrotas en Bilbao y Granada y del empate en Pamplona, esto es, de su peor arranque en 25 anos, se sitúan en lo más alto de la clasificación con un punto más de los que llevaban el año pasado a estas alturas. Su entrenador sufrió en sus carnes los azotes de los críticos, algunos de los cuales llegaron a dudar de que el técnico fuese capaz de mantenerse en el banquillo pasado el fin de año; en estos momentos apenas quedan restos de aquellos temporales. En apenas unas semanas, el equipo ha conseguido revertir la situación y actualmente presenta mejores registros, al menos en lo referente a puntos en Liga, que la pasada campaña. Lo hace, isso sim, en los dos años con menor registro de puntuación de la última década para los dos líderes de la primera división del fútbol español.
Aunque extrapolar esta situación al final de LaLiga sigue siendo aventurado, o fato é que, en los últimos diez años, el FC Barcelona solo ha dejado de alzarse con el título yendo líder en la novena jornada en una ocasión: o liga del 2013/14. El calendario de las próximas semanas no parece que vaya a presentar demasiadas complicaciones a los de Valverde, así que cabe esperar que los buenos resultados se sucedan hasta bien alcanzado diciembre. A esto se suma el aplazamiento de uno de los puntos de inflexión de cada campaña; al posponerse El Clásico, el siempre decisivo enfrentamiento entre merengues y culés, se mantienen las dudas sobre la respuesta del Barça frente a su, a priori, máxima amenaza de cara a cantar el alirón.
LAS CLAVES DE LA RECUPERACIÓN
A nadie se le escapa que las bajas sufridas durante las primeras jornadas condicionaron el arranque de este Barcelona. Todos los defensores de la teoría de la Messi-dependencia encontraban argumentos, partido a partido, para confirmar su opinión. Claro que la baja de Luis Suárez también suma, y aunque su flamante fichaje del año, Antonio Griezmann, ha ido encontrando poco a poco su espacio en la maquinaria del equipo, también es justo reconocer que no tuvo el mejor de los arranques, aunque su calidad siempre estuviera presente en el campo.
FUENTE: Youtube LaLiga Santander
En estos momentos, Griezmann y Suárez son la segunda mejor pareja de delanteros de la competición, solo por detrás del portentoso arranque de Gerard y Cazorla en el Villarreal. La pareja de delanteros culés suma nueve goles, ocho de ellos con el pie, y su buen momento se traslada mejor que en el caso de los delanteros del submarino amarillo en virtud de una mayor capacidad realizadora de los medios y de una defensa más sólida, que les permite mantener en 10 los goles en contra por los 13 del Villarreal, séptimo.
Tampoco se puede obviar la evolución en la defensa, con un Piqué que empieza a recordar al de sus mejores tiempos. Su habilidad en la lectura del rival sigue siendo digna de elogio, y es que el catalán ha demostrado su capacidad para interpretar las intenciones de los oponentes incluso en algunas de las mesas de texas hold’em poker más complicadas del mundo, como pudimos ver el pasado septiembre en el Casino Barcelona, donde ganó más de 350.000€. Su estado de forma sigue condicionando el rendimiento defensivo de un equipo que necesita su veteranía más que nunca.
Y, POR SUPUESTO, MESSI
En LaLiga solo ha anotado dos goles, pero su presencia sigue marcando la diferencia para su equipo. Lo demostró frente al Slavia de Praga con el que fue su primer gol en la presente edición de la Champions League, y que supuso el primer tanto a domicilio para los culés en Europa. Fue titular en el octavo aniversario de aquellos tres goles que le hicieron salir a hombros del Eden Arena, en la fase de grupos de la Champions, tras vencer al Viktoria Plzen.
Necesitó apenas unos minutos para recuperar un balón, cederla a Arthur para que se la devolviera y chutar cruzado, en un gol marca de la casa, para romper el partido desde el inicio. Messi consiguió batir un nuevo récord con este gol, al situarse como el primer jugador de la liga española en anotar durante 15 temporadas sucesivas en la máxima competición europea. Desde su primer gol en Champions, e 2 de noviembre de 2005 frente al Panathinaikos, ha sido capaz de marcar casi un 33% dos 342 tantos del FC Barcelona.
El argentino sigue siendo un crack, pero todavía no ha regresado ese Messi definitivo que viene siendo desde hace más de tres lustros. Cuando consiga recuperar su mejor estado de forma y de confianza, el Barcelona puede que termine de confirmar la buena racha que acumula en los últimos encuentros y que acabe por convencer a los más escépticos. Y todo esto sin entrar a hacer cábalas sobre el mercado de invierno y los posibles movimientos, claro. Antes quedan muchos partidos por disputarse y los suficientes puntos en juego como para no perderse en especulaciones vanas.