Última atualização 24 dezembro, 2023 por Alberto Llopis
Seguro que más de uno de vosotros ha oído hablar del gol del cojo pero ¿cuántos sabéis qué es? Ele Mundial de 1970 fue el primero de la historia en varias cosas, una de ellas en ver una sustitución, por lo menos de manera oficial para la FIFA ya que en países como Inglaterra ya hacía un tiempo que se hacía y en España, permitían cambiar al portero en caso de lesión. Pero hasta entonces, por décadas, se jugó al fútbol sin poder realizar una sustitución. ¿Qué pasaba si un jugador se lesionaba? pues que se quedaba en el campo haciendo bulto.
O objetivo do coxo, una más de la picaresca española
Esto era la teoría porque como siempre, la picaresca muchas veces supera las situaciones. Si bien alguna vez se lesionaba alguien y el equipo acababa con uno arriba haciendo bulto, nació la famosa jugada del gol del cojo. Ese gol que ese jugador supuestamente lesionado acababa metiendo ante la sorpresa de todos. La idea era clara, un jugador fingía una lesión y montaba el paripé con su entrenador que lo mandaba apartado a una banda.
El jugador no luchaba una pelota, se escoraba en un lado del campo y cojeaba pareciendo completamente fuera del partido. Esto provocaba que nadie le prestara atención y así en cualquier jugada a balón parado, cualquier rechace o cualquier acción del juego favorable, aparecía el supuesto cojo para dejar con la boca abierta al rival y meter en la jaula la pelota. A esto se llamó “El Gol del Cojo” y como no, en el fútbol español de la posguerra se convirtió en una jugada habitual, en un recurso más del juego.
Con la llegada de los tres cambios y el fútbol moderno se fue perdiendo esta jugarreta aunque en los 80-90 aún se podía ver de forma habitual en las categorías regionales del fútbol español donde en aquellos campos de tierra tan lejos de los habituales de césped artificial, se jugaban auténticas batallas con balones Mikasa.
Raúl dejó el Real Madrid en el mismo sitio donde debutó y marcando un gol del cojo
Em 2010, Raúl jugaba su último partido con el Real Madrid en La Romareda donde precisamente había jugado su primer partido como madridista. Ele “7” blanco, se lesionaba y cuando se estaba ya preparando para ser sustituido, umaprovechó una jugada para marcar un gol del cojo que además fue el último de los muchos que marcó en su etapa como jugador del Real Madrid. Una acción de picaresca mezclada con épica.