Última atualização 6 abril, 2024 por Alberto Llopis
España acudirá a Brasil con la intención de revalidar el título logrado en Sudáfrica, privilegio que sólo la canarinha en 1962 e Italia en 1938 han podido lograr. Difícil tarea para un equipo que ya volvió en 2012 a hacer la machada de repetir cetro europeo. Claro que con dos años más en la mayoría de los integrantes que acudan al país sudamericano la duda se centra en saber si estamos ante una selección más o menos fuerte que entonces.
La portería y el seleccionador son los mismos que en 2010, con la única incógnita eso sí de saber quién será el guardameta titular. Casillas no juega habitualmente, Valdés sí, pero los galones son los galones y no sorprendería que fuera el meta madridista quien ocupará la plaza de arquero titular. Sea como sea el trío es de total garantía y ninguna selección podrá presumir de llevar tal elenco de porteros.
La defensa mantiene a Ramos y Piqué, pero en buena lógica perderá a un Puyol al que la lesión en la rodilla le impide jugar de continuo. Eso sí, Em troca, gana España un lateral de enorme recorrido y llegada, Jordi Alba, que mejora al ya de por sí rentable Capdevila. Pese a que son muchos los que piensan que ni Ramos ni Piqué están en el mejor momento de forma, quien les escribe no duda de que llegarán, salvo lesión de por medio, en plenitud. Nesse sentido, no se aprecia debilitamiento respecto a Sudáfrica.
Claro que la gran cuestión será saber cómo se comporta el medio del campo. La zona noble de la selección, esa en la que se junta el talento y la magia. Sergio Busquets y Xabi Alonso serán indiscutibles en el doble pivote y Andrés Iniesta, Xavi y Silva tienen muchas papeletas para jugar. Manchego y catalán son las grandes dudas. Los años pasan en balde y parece que el cansancio hace mella. De su estado físico dependerá mucho el devenir de España, si bien en el banquillo podría haber recambios de garantías como Cazorla, Mata, Javi Martínez o Pedro, quien se encuentra en el mejor momento de su carrera y puede ser el gran tapado de la Roja. Mismas o parecidas opciones que en Sudáfrica, pero con cuatro años más.
Finalmente, la parte de arriba es el quebradero de cabeza de Del Bosque. La nacionalización de Diego Costa le abre la puerta de par en par a la titularidad, si bien Álvaro Negredo está en un momento sublime también. ¿Se atreverá a dejar fuera a Fernando Torres o David Villa? Un enigma que seguramente no se despejará hasta el mes de mayo.
Analizando demarcación que duda cabe que España acudirá con la mejor plantilla posible, con las mejores individualidades, pero con rivales que ya la conocen y que tienen ganas de bajar a la Roja del Trono.
Pontos fortes:
- La calidad. El medio del campo del equipo es el mejor del planeta y posiblemente de la historia. Pocas veces se juntó talento en un mismo equipo. Si funcionan los Cesc, Silva, Iniesta, Xavi, Xabi Alonso o Busquets, sólo cabe mirar la exhibición.
- La confianza. Acuden a Brasil conscientes que cuando quieren son los mejores, como demostraron en la Eurocopa de 2012. La final de la Copa Confederaciones debe servir de moraleja, de aprender de los errores.
- Arriba, cualquier alternativa es válida. Hay dudas sobre quién será el 9, pero sea quien sea asegura goles. Y es un Mundial un jugador enrachado, es una garantía.
Pontos fracos:
- Falta de físico. España no tiene el poder físico de otras selecciones y eso lo puede acusar en un Mundial con fuertes temperaturas. Si a ello, le sumamos la veteranía de algunos jugadores, todo se complica un poco más.
- Brasil. Su gran rival. Sabe cómo jugarle y encima contará con el beneplácito de los árbitros. Como se fosse pouco, el caso Diego Costa pone más morbo.
- Xavi. Puede ser el punto débil o el fuerte. De su estado dependerá el resultado de la selección. De su estado de forma y del de Ramos, Iniesta o Xabi Alonso, muy preocupantes en estos momentos.
Alineación:
Entrenador:
Vicente del Bosque acude a su segundo Mundial tras seis años en el cargo. Hombre tranquilo, de nada le servirá la presión que ejerza la prensa sobre posibles alineaciones. Reflexivo, tiene el don de acertar los cambios que realiza y saber leer los partidos, algo clave en campeonatos cortos.
España buscará la posesión, el toque y conociendo a su seleccionador, a buen seguro que no habrá revolución traumática, sino más bien todo lo contrario, continuidad con algún que otro cambio sin hacer mucho ruido respecto a Sudáfrica. Si algo es innegociable para él, es el doble pivote Xabi Alonso-Sergio Busquets. A partir daí, se construye el equipo. Todos lo saben.
história:
- 1 mundo
- 3 Eurocopas
- 1 Oro olímpico