Última atualização 10 dezembro, 2018 por Alberto Llopis
Si existe una ciudad donde el fútbol se vive con tensión, emoción y viveza esa no es otra que Montevideo. La capital de Uruguay con una población de 1.100.000 personalidades (1.900.000) en su área metropolitana fue la ciudad que fue sede el primer Mundial en 1930 y la urbe donde hasta 15 equipos tienen el honor de jugar en ella.
Cada barrio tiene su equipo y que de donde uno nace uno es. Claro, se suele decir que en Montevidéu la mitad son de Penarol y la otra de Nacional, pues son los dos grandes de la capital, masBella Vista, Central Espanhol, Cerrito, Danúbio, Defensor Sporting, Fénix, Liverpool, Progreso, corrida, Rampla Juniors, River Plate y Wanderers también tienen cabida en una Primera División en la que sólo Juventud y Cerro no son de Montevideo. Es decir de 16, 14 de Montevideo. Ni Moscú, ni Londres, ni siquiera Bucarest o Estambul tienen tanta capacidad de monopolio.
Todo ello se traduce en instalaciones deportivas. Es de sobra conocido el estádio Centenario, el gran icono de la ciudad y el recinto donde se disputó la primera final de un Mundial, pero también muchos otros centros existen, como el Belvedere, el Complejo Rentistas, el Gran Parque Central, el Jardines del Hipódromo, el José Pedro Damiani, “A Bombonera”, el Luis Franzini y el Luis Tróccoli, o los Estadios Parques Abraham Paladino, Alfredo Víctor Viera, Omar Saroldi, José Nasazzi, Osvaldo Roberto, Maracaná y Palermo. Todos eles, con un aforo con capacidad superior a 5.000 personalidades.
Y es que rodeada del río de la Plata, y a escasos 80 kilómetros vía mar de Buenos Aires, ambas ciudades configuran una lucha eterna, por ser la capital del fútbol. Con una pequeña diferencia, mientras en Buenos Aires, existen unos 20 millones de población, en Montevideo apenas uno. Realmente de mérito, por eso en Colgados por el Fútbol lo destacamos.