Última actualización 15 abril, 2021 por Alberto Llopis
Jean-Marc Bosman cambió el fútbol a mediados de la década de los 90´s. No ganó un Mundial ni una Eurocopa ni un Balón de Oro, ni siquiera fue un jugador de primer nivel, pero él, cambió este deporte. El 15 de diciembre de 1995 fue aprobada la llamada «Ley Bosman» en honor al futbolista que la propició. ¿Pero en qué consistía esta ley?, ¿por qué cambió el fútbol?
¿Quién era Jean-Marc Bosman?
A principios de los 90´s, Jean-Marc Bosman intentaba hacer una carrera digna en el mundo del fútbol. Como hemos dicho antes, no se trataba de un jugador de élite pero tenía su mercado dentro de sus posibilidades. En esos momentos, Bosman, jugaba en el RFC Lieja y recibió la posibilidad de jugar en Francia, en las filas del modesto Dunkerque.
En aquel entonces dentro de la Unión Europea se podía circular libremente entre países siempre que se fuera ciudadano de alguno de los países afiliados a la Unión. En el mundo del fútbol no era así, existían limites de extranjeros fueran europeos o de otra parte del mundo. En España solo podían jugar tres y ser cuatro en el equipo fueran franceses, portugueses o africanos.
La cuestión es que el conflicto entre Bosman, el RFC Lieja y el Dunkerque francés, acabó en el tribunal europeo que acabó suprimiendo una serie de clausulas que tuvieron una serie de efectos colaterales entre ellos el libre mercado dentro del fútbol. Así, los jugadores europeos dejaron de ser extranjeros pasando a ser nacionales al ser miembros de la Unión y fomentando el libre mercado. La Ley Bosman pues, cambió el fútbol y fomentó el modelo actual con jugadores de distintas nacionalidades dentro de un mismo equipo.
¿Qué fue del hombre que cambió el fútbol?
Por otra parte, el jugador recibió una cantidad que hoy en día sería aproximada a 780.000 euros de indemnización y desapareció del mapa hasta hace poco. ¿Qué fue de Bosman, el hombre que cambió el fútbol?, pues acabó mal, muy mal. Se quedó en el paro, ningún equipo quería ficharle. Perdió su matrimonio, del cual tenía dos hijos, todo su dinero y acabó en la indigencia más absoluta. Tuvo que irse a vivir con sus padres donde acabó recluido en el garaje. Alcohólico empedernido, engordó un montón de kilos y la alopecia se cebó con él.
Para más inri, fue condenado por agredir a su novia y a la hija de esta. La Ley Bosman cambió el fútbol y parece ser que le cambió la vida a él, pero para mal. Actualmente vive gracias a ayudas del estado. Un mal final para un hombre que a su manera, es historia del fútbol.