Última actualización 4 enero, 2014 por Julio Muñoz
En los últimos años, muchas son las competiciones nacionales de que permanecen en un segundo plano arrinconadas por las ligas y los torneos internacionales. Partidos entre semana, sin mucha emoción, a horarios intempestivos en mitad de jornadas laborales y en medio de un duro invierno hacen que la mayoría de copas nacionales estén marginadas y sólo tengan su momento de gloria en la final.
España, Italia, Alemania o la propia Francia son ejemplos de como estas competiciones tan históricas y tan arraigadas a las gestas no funcionan. El
Sin embargo, en medio del océano también existe una piedra donde apoyarse. Es el caso de la FA CUP inglesa. El torneo más antiguo del mundo es un ejemplo de como hacer las cosas en todos los sentidos. Creado en 1871, para empezar es un torneo abierto a cualquier equipo amateur o profesional que pertenezca a la Premier, la Football League o alguna de las seis siguientes divisiones aficionadas. La vida da oportunidades y nada como la FA para ejemplificarlo. Los requisitos para entrar son tan sencillos como los siguientes:
– tener un estadio propio. No es necesario contar con un aforo determinado, simplemente con unas dimensiones (111 o 100 de largo por 75-64 de ancho), tener vestuarios para ambos equipos y toma de luz con una toma de luz de mínimo 120 vatios.
– pagar la tarifa correspondiente por participar, que asciende a unas 75 libras, (90 euros).
– medidas de seguridad para posibles emergencias.
Esto hace que se llegué a cifras tan altas como los 762 de la temporada 2009-10 (récord hasta la fecha).
Otro aspecto que lo hace realmente emocionante es el formato. Desde la primera ronda, son todos eliminatorias directas sin cabezas de serie. Todo jugado a partido único en el campo del rival que el sorteo determine. Eso sí, los clubes de la Premier entran más tarde en la tercera ronda. Si el partido acaba en empate se juega un Replay en menos de 10 días generalmente en el campo del equipo que lo ha hecho de visitante. Si persiste el empate, es cuando entonces se acude a prórroga o penaltis. ( hasta 1990 podían haber tantos Replays como empates hubieran y de hecho llegaron a producirse hasta seis desempates).
La Sexta Ronda (o cuartos de final) tradicionalmente se juega en marzo y las semifinales, ya en campo neutral, un mes después. La final se suele jugar el sábado siguiente a la conclusión de la Premier League en mayo. Normalmente, en un escenario fijo: el nuevo Wembley. El ganador es invitado a participar en la Europa League, o el finalista si el campeón ha quedado entre los cuatro primeros de la Premier.
A nivel económico, la FA también está en otra galaxia. El torneo es uno de los diez acontecimientos de interés general y es retransmitido por la cadena ITV 1. que paga los derechos nacionales a la Federación inglesa que a su vez los reparte entre los equipos de la siguiente forma:
No sólo por televisión cobran los equipos. La propia Federación reparte ganancias a los equipos por sus actuaciones. De esta forma, el campeón puede llegar a enfundarse más de dos millones de euros.
A todos esos beneficios, lógicamente hay que sumar los ingresos por taquillas, que pueden ser suculentas si el equipo grande acude a visitar a un conjunto modesto. En ese sentido igual que la Copa puede ser beneficiosa para un equipo, puede suponer un gasto extra para otro, aunque eso sí matizado por los ingresos que da la Federación inglesa.
El ganador del torneo, finalmente recibe la Copa, posiblemente más famosa del mundo en Wembley adornada por unas cintas, que, ironías de la vida, le juega la mala pasada de preguntarle al subcampeón ¿ Qué se lleva a la final siempre, pero nunca se usa?. Así, se las gasta la FA Cup, la competición con más solera del mundo.