Última actualización 24 julio, 2024 por Alberto Llopis
El fútbol siempre deja anécdotas curiosas como la sucedida en la League One inglesa (el equivalente a la Segunda B en España). El Gillingham, jugaba como visitante en el estadio del Milton Keynes Dons, donde disputaba un partido vital para intentar alejarse lo máximo posible de los puestos de descenso.
El árbitro revisó las equipaciones de ambos equipos determinó que el Gillingham no podía jugar con su primera equipación por lo que al ser visitantes, debían usar la segunda equipación. El problema fue que a su utilero, Bob Lewin, se le olvidaron los segundos equipajes, «liandola parda». Ante este problema, estamparon los números de los jugadores en las equipaciones de entrenamiento para poder jugar del paso en una acción de inventiva e imaginación.
Al final, quince minutos antes de comenzar el choque, llegaron las equipaciones necesarias, pero el pobre Bob Lewin ya estaba sentenciado. El club implacable decidió despedirlo por su olvido. El partido por cierto acabó 3-2 a favor del MK Dons.