Última actualización 16 octubre, 2021 por Alberto Llopis
Cuando la mala suerte se alía con alguien parece que no le abandona. Esto es lo que podría pensar a nivel deportivo el protagonista de este artículo. Y es que ha descendido tres años seguidos con tres equipos diferentes, casi nada. Y eso que hace unos años se trataba de un jugador bastante prometedor. Hablamos del delantero francés Emmanuel Rivière, cuya pesadilla empezó hace tres temporadas cuando bajó a los infiernos con uno de los más grandes de la Premier League: el Newcastle.
Esto provocó que el club inglés le buscara una cesión donde seguir desarrollando su fútbol, en este caso a LaLiga donde Osasuna se hizo con sus servicios- Tras 17 partidos y cero goles, y una temporada floja y paupérrima de todo el equipo donde el club de Pamplona sólo consiguió hacer 20 puntos, el francés acumuló su segundo descenso seguido.
Con otro descenso y otra pobre temporada as sus espaldas, tuvo que buscar otra salida. En este caso fue el Metz quien le abrió las puertas para reforzar su delantera. Marcó seis goles en 31 partidos, cifra insuficiente para evitar que el equipo acabará en la Ligue2. Sin quererlo obviamente, el pobre se ha convertido en el jugador gafe, con tres descensos seguidos.