Última actualización 18 noviembre, 2022 por Alberto Llopis
Parece una broma y es bastante surrealista pero lo cierto es que ocurrió este domingo durante el encuentro entre Jerez y Cacereño, en el Grupo 14 de Tercera división. Y es que al comienzo del partido, el árbitro designado para la contienda no autorizó al Cacereño, equipo visitante, a jugar con ninguna de las dos camisetas oficiales que llevó para la disputa del encuentro.
El equipo de Tercera que acabó pintando los dorsales con un boli
El Jerez llevaba la camiseta verde y negra, al igual que la primera equipación de los de Cáceres. La segunda camiseta de los visitantes era de color negro, pero el árbitro tampoco quiso dar el visto bueno, por lo que se acabó tomando una idea tan original como de risa. El equipo visitante se puso una simple camiseta blanca con los dorsales pintados a bolígrafo. El Cacereño, con su camiseta de andar por casa y los dorsales pintados a mano, remontó un 1-0 y ganó 1-3 al final. Dejando una curiosa anécdota que podrán contar en sus noches de risas entre amigos.
El cuadro de Cáceres explicó en su Twitter el motivo por el cual tuvieron que jugar con camisetas de andar por casa con los dorsales pintados a bolígrafo.