Última actualización 21 junio, 2017 por Alberto Llopis
Juanma Lillo volverá a entrenar en el fútbol colombiano donde dirigirá los destinos de todo un campeón de la Copa Libertadores como Atlético Nacional. El de Tolosa, vuelve a los banquillos colombianos donde ya dirigió entre 2013 y 2014 a otro grande del fútbol colombiano como Millonarios. En el país sudamericano se frotan las manos ante la llegada del técnico español, al que siempre se vende como uno de los mejores de España. Lo cierto, es que su currículum arroja un balance menos esplendoroso. Lillo llega a los verdolagas tras su etapa como segundo de Sampaoli en el Sevilla.
Lillo empezó muy pronto en el mundo de los banquillos. Nacido el 3 de noviembre de 1965, con 30 años, consiguió el que fue su mayor éxito en un banquillo, el doble ascenso de categoría del Salamanca desde Segunda División B hasta la máxima categoría. Gracias al prestigio adquirido en el Salamanca, fue fichado por el Real Oviedo donde debutó en Primera y fue cesado por primera vez. Pasó por el Tenerife donde en su segunda temporada también fue cesado. Tras casi dos años sin entrenar, en el 2000 fue fichado por el Real Zaragoza, que acabó echándole también por sus malos resultados. Era el tercer equipo en el que estaba tras su salida del Salamanca y los tres, lo habían echado. Su prestigio poco a poco se iba acabando.
Pasaron tres años más hasta que volvió a coger las riendas de otro equipo, esta vez de Segunda División. Cogió las riendas de un debutante Ciudad de Murcia que le acabó cesando al técnico. Lillo continuaba acumulando despidos, cuatro en sus últimos cuatro equipos. Su siguiente paso fue el Terrasa, también de Segunda por aquel entonces, donde acabó dimitiendo casi con el equipo descendido, antes de lo que lo echaran. Su credibilidad en un banquillo en esos momentos estaba resentida. Se fue a probar fortuna a México, donde fichó por los Dorados de Sinaloa. Allí, fichó a un Pep Guardiola cuya carrera como futbolista estaba prácticamente acabada y aún no se había convertido en el entrenador de éxito que luego sería.
Con polémica y de una manera muy turbia, su equipo acabó descendiendo. Tardó dos años en volver a firmar con un equipo y lo hizo por la Real Sociedad que en aquel momento, militaba en Segunda División. Aquí se produjo un hecho insólito en su carrera desde 1995, no fue cesado aunque en su segunda temporada, no fue renovado. Al menos no acumuló un descenso. Después pasó por el Almería, ya en Primera División de donde también fue cesado un 20 de noviembre de 2010. Su posterior recorrido en Millonarios donde no triunfó y como segundo de Sampaoli, lo ha mantenido en la élite los últimos años.
¿Cómo es Juanma Lillo como entrenador? Defensor del juego bonito, del fútbol de un modelo de juego de ataque posicional, llegó a estar en las quinielas del Barcelona (o eso quiso vender alguien) para ser el entrenador de los culés. Viendo su historial, plagado de fracasos, descensos, ceses y ausente de títulos, el asunto parecía cuanto menos un chiste. Todo un maestro de la retórica.
Visto como la eterna promesa de los banquillos españoles desde que con 30 años irrumpió como un técnico joven e innovador, Lillo, se lanza a su segunda aventura en el fútbol colombiano donde la prensa de aquel país llegó a calificarlo en su primera etapa como «uno de los mejores estrategas tácticos del fútbol español» o «el mentor y profesor de Pep Guardiola». Después de acumular tantos fracasos, siguen considerándole como un buen entrenador en algunos sitios, no en España, donde parece que su crédito se agotó hace tiempo. Esperemos que por Colombia le vaya mejor que la anterior vez. Mucha suerte y a ver si algún día vemos a ese Lillo que siempre se queda en insinuación.