Última actualización 23 abril, 2024 por Alberto Llopis
Bienvenidos al fútbol pobre español. La probable incomparecencia del Racing de Santander esta noche contra la Real Sociedad nos recuerda las grandes diferencias económicas y la desigualdad entre los clubes. Cuando los grandes equipos españoles encuentran la condescendencia de Hacienda y de la Seguridad Social, los modestos luchan por sobrevivir en las categorías inferiores. Clubes en manos de administradores económicos desconocedores del organigrama deportivo y amantes de los libros de cuentas que no son los más indicados para dirigir míticas instituciones deportivas.
La triste realidad económica de la Segunda B
Son muchas las sentadas e incomparecencias que recordamos en la historia. Sin ir más lejos recientemente en el fútbol brasileño pudimos observar una serie de sentadas como protesta contra el calendario del campeonato. En nuestro fútbol, son varios los equipos que un día se sentaron como reivindicación, normalmente como forma visible de protesta contra su directiva por impagos. Casos como el del Racing de Santander inundan el fútbol español en la actualidad. Lamentablemente, compartimos situaciones complicadísimas como la del portero del equipo cantabro Oumar Diaby. Desde el club cántabro le prometieron un salario de unos 450 euros aparte de manutención y vivienda en verano.
Sin embargo la realidad es totalmente diferente, ya que en agosto él y sus compañeros fueron desalojados por los impagos de la entidad y de su presidente Ángel Harry Lavín en particular. La gran mayoría de los integrantes de la plantilla acumula cinco meses sin cobrar y más de uno vive en la miseria.
Este joven natural de Malí pernocta en una habitación de no más de 10 metros cuadrados, caldeados por un calefactor prestado y durmiendo en un sofá cama o un camastro en el suelo. La pesadilla podría ser aún más dura si no fuera por la ayuda que recibe de su novia y compañeros. Son muchos los problemas financieros de varios clubes que no hace mucho eran habituales de la máxima categoría y tienen grandes deudas con las diferentes organizaciones gubernamentales y jugadores.
Ciudades históricas en Segunda B
A perro flaco todo son pulgas, y la verdad que ciudades como Santander, Oviedo, Logroño o Salamanca son noticia y no precisamente por su fútbol. Ciudades que añoran fútbol de calidad y que sueñan con que sus equipos vuelvan a brillar a nivel nacional. Esta última jornada la Segunda División B nos dejó el enfrentamiento entre la UDL y el Real Oviedo en Las Gaunas. Increíblemente los aficionados más radicales de ambos conjuntos se encararon horas antes del encuentro en una trifulca que se convirtió en batalla campal. No es la primera vez que esta clase de aficionados llevan a cabo diferentes quedadas o encuentros a través de las redes sociales para batirse en duelo y dar algo más que una triste imagen. Un problema muy serio, ciudades sin fútbol pero con todos los problemas que le rodean.
La policía obligada a intervenir en Linares
En el fútbol andaluz pudimos observar también como un policía nacional encañonaba con su escopeta de bolas de goma a un grupo de seguidores que increpaban al trío arbitral. Tras el pitido final del partido entre la Balompédica Linense y el Córdoba B (1-2), se vivió quizás la situación más tensa de esta jornada cuando un representante de las fuerzas policiales encañonó nerviosamente casi a bocajarro a unos aficionados.
Tristes noticias las que nos deja la actualidad de la categoría de bronce. Equipos con serios problemas que logran sobrevivir en una categoría que es una ruina. Casos como el del Racing que ha logrado una hombrada este año en la Copa del Rey, eliminando equipos de categoría como Sevilla y Almería, y que lidera el Grupo I de Segunda B. Por principios y valores morales deben tomar la difícil decisión de no presentarse ante la oportunidad de sus vidas, 90 minutos que les darían la posibilidad de disputar unas semifinales contra el F.C. Barcelona.
¿Deben dejar pasar el tren de sus vidas que para la gran mayoría no volverá a pasar?. ¿Tendrá dicha incomparecencia el indulto que en su día tuvo el Barça o será duramente castigado?. Lo que está claro es que los clubes son mirados y tratados totalmente diferentes según como se llamen y en que piso se encuentren en el fútbol español. Justicia e igualdad brillan por su ausencia, igual que la inteligencia en algunos seguidores y el sentido común de ciertas personas que deben proteger los derechos de los ciudadanos.