Última actualización 5 abril, 2024 por Alberto Llopis
A lo largo de la historia, son muchos los torneos, eliminatorias, finales y partidos que se han decidido gracias a una tanda de penaltis. Definidas como una loteria, generalmente las acaba ganado el equipo que tiene más calidad aunque muchas veces las gana quien tiene los nervios más templados y la sangre más fría. Lo que si que es raro, casi imposible, es ver una tanda de penaltis donde acaben tirando los 11 hombres de cada equipo y tengan que volver a empezar. Como hemos dicho casi imposible pues eso es lo que ocurrió en el Liverpool-Middlesbrough de la Capital One inglesa.
Nada más y nada menos que 29 penaltis fueron necesarios para desempatar un partido que había acabado empatado a 2 entre el Liverpool de la Premier y el Middlesbrough de la Championship. El partido disputado en Anfield se fue a la tanda de penaltis tras 120 minutos de juego en los que ninguno de los dos conjuntos fue capaz de ganar. El partido podría haber pasado a la historia por el meritorio empate del conjunto de inferior categoría e incluso por el debut con gol de un joven de 17 años llamado Jordan Rossiter en las filas del Liverpool pero los 29 lanzamientos de penalti, algo casi inédito, eclipsó todo.
Finalmente, tras lanzar los 11 jugadores de cada equipo, la tanda acabó 14-13 para el Liverpool, 27 aciertos y 2 fallados en un partido, que quedará en la memoria de los aficionados al fútbol y como una más de las multiples anécdotas que deja este deporte, tan bello e imprevisible llamado fútbol.
PD: Te dejamos la larga tanda con todos los penaltis.