Última actualización 2 mayo, 2024 por Alberto Llopis
Parma es una pequeña ciudad al norte de Italia que apenas supera los 180.000 habitantes pero que es conocida por ser la sede de Parmalat (una de las empresas del sector alimentario más importante del país transalpino). Sin embargo, hubo un tiempo donde la población presumía de tener uno de los mejores embajadores del mundo: su equipo de fútbol, el Parma FC.
El Mítico Parma de los 90
Y es que en la década de los 90, este conjunto creado un 27 de julio de 1913 se paseó por Europa demostrando un potencial inmenso y siendo uno de los equipos más temibles del mundo. Uniformado unas veces de amarillo y azul, otras de blanco y negro, lo cierto es que de la mano de Nevio Scala, el cuadro parmesano aterrizó en la Serie A en el verano de 1990 iniciando un periodo glorioso y convirtiendo su feudo, el Ennio Tardini, en un fortín inexpugnable.
Conducido por el empresario Calisto Tanzi (dueño de Parmalat) lo cierto es que el éxito del club estuvo ligado al de la empresa alimentaria al punto de que cuando la compañía quebró (siendo la quiebra más grande de toda Europa), el equipo se desmoronó. Sin embargo, en su esplendor llegó a acumular ocho título de enorme prestigio en apenas 10 años, dándose la extraña coincidencia, de que junto al AC Milan es el único equipo italiano que posee más trofeos extranjeros que nacionales.
Llegada de títulos y de repercusión internacional
El inicio del éxito vendría nada más ascender. En la temporada 91-92 el equipo se hacía con la Copa de Italia. Un buen presagio que le permitía clasificarse para la extinta Recopa de Europa, que levantaría una temporada después al imponerse en la final al Royal Amberes. Marco Ballota, Antonio Benarrivo, Faustino Asprilla o Tomas Brolin eran la base de un conjunto que empezaba a mostrar parte de su gran poderío, algo que confirmaría con la Copa de la UEFA ganada en 1995 ante la Juventus, y con la incorporación de nombres como los de Dino Baggio, Gianfranco Zola o Fernando Couto.
La entrada de Carlo Ancelotti primero y Alberto Malesani después, produjo una gran transformación del equipo, en parte también por la fuerte inversión económica recibida, lo que llevó al Parma a vivir una segunda mitad de década de los 90 inolvidable. Subcampeón de la Serie A (su mejor posición) en la campaña 96-97 llegó a participar en la Champions League, donde, sin embargo no cuajó una buena actuación.
No obstante, la llegada de nuevas estrellas de renombre como Lilian Thuram, Gianluigi Buffon, Juan Sebastián Veron, Hernán Crespo, Enrico Chiesa, Fabio Cannavaro o Roberto Sensini dio un nuevo empujón al equipo llevándolo a ganar su segunda Copa de la UEFA al golear en 1999 al Olympique de Marsella en Moscú.
Caída a los infiernos, desaparición y refundanción del Parma
El gran cenit de un equipo al que sin embargo la mala situación económica de Parmalat en 2002 llevaría a hacerle desprender de parte de sus mejores jugadores y a perder mucho del protagonismo adquirido en esa época gloriosa hasta el punto de acabar en 2002 fuera del Top 6 por primera vez desde su ascenso a la Serie A en 1990. Pero esto solo iba a ser el principio de tiempos oscuros para la entidad italiana.
Entre 2004 y 2010 el club vivió de todo: competiciones europeas, descenso y ascenso. Pero lo realmente duro llegaría en 2015 cuando el club, debido a una grave situación económica, iba acabar despareciendo como Parma FC y dando paso al Parma Calcio 1913 e iniciando un camino largo de 4 años que los llevó desde la Serie D hasta la Serie A de nuevo, ascendiendo una categoría por año para volver a competir entre los mejores del fútbol italiano cual Ave Fenix. Luego vendrían otros descensos y ascensos.