Última actualización 16 noviembre, 2012 por Julio Muñoz
El Málaga debutó en la Liga de Campeones con una clara victoria ante el Zenit de San Petesburgo por 3-0, en un partido extraordinario en el que el centrocampista malagueño Francisco Alarcón ‘Isco’ fue determinante con dos goles, uno de ellos de excelente ejecución con un lanzamiento por la escuadra.
El conjunto ruso se presentó con la baja del centrocampista belga Axel Wistsel, lesionado, por el que pagó 40 millones de euros al Benfica, pero con la gran novedad de otro de los recientes refuerzos, el delantero brasileño Hulk, que formó en la delantera con el ex sevillista Alexander Kerzhakov.
El técnico del Málaga, el chileno Manuel Pellegrini, sólo hizo un cambio con respecto a los que jugaron contra el Levante en la Liga española, el lateral derecho Jesús Gámez, por Sergio Sánchez.
El conjunto malagueño inició el partido muy concentrado, avisando con un córner, hasta que llego la jugada personal de Isco, por la izquierda, evitó al defensor Anyukov, y dentro del área lanzó con efecto pegando en el poste izquierdo y consiguiendo el primer gol del partido en el minuto 3.
El Zenit se vio sorprendido, pero es un buen equipo, con un jugador sobresaliente como Hulk, que cogió un balón fuera del área y su disparo lo repelió el larguero un minuto después. El Málaga con el marcador a favor, le dio el balón al equipo ruso, y empezó a sufrir con alguna llegada con peligro.
A pesar de esta incidencia, el Málaga mantenía el equilibrio, y en otra internada, pero esta vez por la derecha, el pase de Gámez, lo aprovechó Saviola, para batir por bajo y tras pegar en el poste al guardameta Malafeev, en el minuto 13. Los malaguistas cogieron la directa y el delantero argentino tuvo el tercero y el cuarto, pero uno se le fue fuera y el otro dio en un defensor cuando el balón iba dentro de la portería.
El Málaga volvió a entregarle el balón al Zenit, reculó diez metros, y el conjunto ruso intentó acortar diferencias. Aún así, los locales cuando tenían el esférico creaban peligro y Saviola, pudo anotar el tercero tras un pase de Joaquín, pero el disparo salió fuera.
Bajó mucho el ritmo los malaguistas y los visitantes empezaron a empequeñecer al Málaga. Hulk, Kerzhakov, Shirokov y Lombaerts, tuvieron la oportunidad de acortar diferencias, pero entre Caballero y la mala puntería dejaron el marcador en el descanso 2-0.
Pellegrini, viendo los graves problemas en el centro del campo, dejó en el banquillo a Portillo e hizo debutar al mediocentro chileno Miguel Iturra. Se había apagado el Málaga, porque nuevamente Bystrov, tuvo la ocasión de acortar diferencias. Fue un toque de atención, porque el equipo malagueño despertó.
En un contragolpe, Eliseu, sólo delante de Malafeev, falló lo que hubiera supuesto el tercer gol, después de una gran intervención del guardameta ruso. El Zenit dominaba, el Málaga esperaba y picaba en el área contraria, con daño, pero sin eficacia hasta que Isco, cogió el balón en el borde del área y su lanzamiento se coló por toda la escuadra en el minuto 76.
El encuentro estaba roto y sentenciado y el Málaga ofreciendo una lección de fútbol, de coraje, de corazón, de cumplimiento, de fuerza y de lucha. Joaquín desperdició el cuarto, que paró Malafeev. Al final gran estreno malaguista en Europa con una victoria justa y trabajada.