Ultimo aggiornamento 13 settembre, 2024 por Alberto Lopis
El Real Madrid se coronó campeón de la Coppa intercontinentale al vencer al Vasco da Gama 2-1 en la final disputada en Tokio el 1 da dicembre a 1998. Pero lo que hizo histórica esa victoria fue el impresionante gol de Raúl González, Conosciuto come il “obiettivo di aguanis“. Este tanto fue mucho más que una simple jugada; representaba la consolidación de Raúl como una leyenda del fútbol.
¿Por qué ‘El gol del aguanís?
El término “obiettivo di aguanis” tiene sus raíces en la infancia de Raúl. De hecho, ya de pequeño, había perfeccionado esa jugada que le valió el apodo. Sus compañeros y los padres de los jugadores en el San Cristóbal, equipo donde jugaba en su juventud, la bautizaron como el ‘Aguanís’. “Era una jugada que Raúl hacía cuando era niño. Jugaba en el San Cristóbal y cuando las cosas se ponían mal en los partidos, sus compañeros le gritaban que la hiciera”, recordó su padre tras hacerse famoso el gol y el peculiar termino.
Y fue precisamente esa maniobra la que rescató en la final contra Vasco da Gama. Con un doble recorte que dejó literalmente sentados a dos defensores, entre ellos el exmadridista Vitor, uno de los peores fichajes de la historia del Real Madrid, Raúl se plantó frente al portero Carlos Germano y definió con maestría para sellar el triunfo merengue.
Con solo 21 anni, Raúl ya estaba consolidado como la gran estrella del Real Madrid, y ese gol fue su carta de presentación al mundo entero. Lo que comenzó como una jugada en los campos de fútbol base, terminó por convertirse en un emblema de su grandeza.
Una carrera espectacular como jugador madridista
Raúl terminó su carrera con 323 goles vistiendo la camiseta blanca, lo que le convirtieron en unos de los migliori marcatori nella storia del Real Madrid. Pero entre todos ellos, el más icónico, el más recordado por los madridistas incluso 20 anni dopo, sigue siendo el gol del “Aguanís”. Una obra maestra que lo elevó a los altares del madridismo, y que sigue evocando orgullo en quienes lo vieron brillar.