Última actualización 5 abril, 2024 por Alberto Llopis
Que los futbolistas son tipos peculiares no escapa a nadie. Que son maniáticos y excéntricos en muchos de los casos tampoco. Ahora bien, ir a negociar un fichaje y pedirse un chorro de whisky en el café y ponerse a fumar un pitillo mientras hablas con el director deportivo del equipo que te quiere fichar, no parece la mejor opción. Eso es lo que hizo el controvertido Enmanuel Adebayor cuando los dirigentes del Lyon se reunieron con él para ficharlo tras quedar libre del Crystal Palace.
El jugador de Togo, con un amplio currículum en equipos tan importantes como el Arsenal, City, Real Madrid o Tottenham entre otros, quedó libre tras no renovar su vinculación con el Crystal Palace de la Premier. Una oportunidad en la que los dirigentes del Olympique de Lyon decidieron lanzarse a firmar al togolés, un futbolista de prestigio para su club. Sin embargo el primer contacto hizo que los dirigentes decidieran no firmarle.
Según contó Bruno Genesio, entrenador del club, se reunió con Adebayor para ver su predisposición para firmarlo porque era un futbolista que había jugado en grandes equipos, pero salió del local convencido que no era el jugador ideal para su equipo. «Teníamos sitio para Manu en el equipo, por lo que quedamos en Lyon para tomar un café. Pero cuando llegamos se pidió un chorro de whisky para el café y se puso un cigarro en la boca.Estaba dispuesto a escucharle, ya que era alguien que había jugado en el Arsenal, Manchester City, Tottenham y Real Madrid. Pero lo que siguió confirmó mi primera impresión: no había lugar para él en nuestro club”.
No es la primera ni la última excentridad de «Manolito» como le llamaban en el Real Madrid. Hace no mucho, a finales de 2014, se marchó en plena temporada con el Tottenham a su país para que le quitaran un mal de ojo que según el jugador, le había echado su familia. Una historia que te contamos en su momento en este artículo.