Última actualización 17 abril, 2017 por Alberto Llopis
Vergüenza, asco, repudio..los adjetivos se quedan cortos tras ver el enésimo acto de violencia que nos llega por parte de Barras Bravas de Argentina y que ha acabado con la muerte cerebral de la victima de la agresión. En este caso nos llega desde Belgrano, Córdoba, donde Enmanuel Balbo, hincha de Belgrano, fue brutalmente apaleado, golpeado y arrojado desde varios metros al vacío por Barras Bravas de su propio club en el estadio Mario Alberto Kempes de la ciudad cordobesa. Una agresión y un asesinato con intrahistoria y más drama si cabe, el mismo personaje responsable de su muerte, había sido culpado de asesinar a su hermano 4 años antes.
Enmanuel Balbo, se encontró en el estadio Mario Alberto Kempes a la persona que supuestamente había asesinado a su hermano cuatro años antes. Un jefe de la Barra llamado «Sapito» Gómez. «Me mató un hijo y ahora me está por arrebatar otro», aseguró Raúl Balbo, padre de Enmanuel en una entrevista con Cadena 3. «Mi hijo no estaba robando en la cancha ni tenía un tatuaje de Talleres. El problema nace porque a mí hace cinco años me mataron a mi hijo. Y Emanuel va a la cancha y se encuentra con uno de los que lo mataron. Ahí se armó el problema», relató.
El padre, que confirmó la noticia de la muerte cerebral de su hijo Enmanuel en el hospital, declaró que su hijo fue atacado por un grupo de hinchas que lo empezaron a golpear cuando uno de ellos dijo que era hincha de Talleres como si eso sólo fuera motivo suficiente para matar a alguien, ser de otro equipo. El «autor intelectual» de la barbarie es «Sapito Gómez» que había estado involucrado en el crimen del hermano de Balbo unos años antes.
La policía de Córdoba, Argentina, confirmó que hay cuatro personas detenidas por el episodio aunque Gómez estaba fugado. La representante de las fuerzas del orden que investigan el crimen afirmó que los cuatro detenidos son los que están al final de la escena del vídeo donde se observa cuando Balbo fue arrojado desde la grada del estadio Mario Kempes en el derbi de Córdoba Belgrano-Talleres.
Un triste hecho que se suma a una terrible lista y es que la impunidad con la que campan las Barras Bravas por Argentina en un ambiente de corrupción y delincuencia es lamentable. Ya hablamos de ellas en nuestro artículo las Barras más bravas de Argentina y quedaron muy bien retratadas en el reportaje del español Jon Sistiaga en 2012 que vale la pena veer. Una triste lacra para la sociedad argentina consentida por casi todos en el bello país sudamericano.