Última actualización 15 agosto, 2014 por Alberto Llopis
Si ganar una Liga en un país es difícil, imaginen hacerlo en dos países diferentes. Si pocos equipos pueden presumir de haber jugado en más de una liga, seguramente muy pocos habrán conseguido la proeza que realizó en 1941 el Rapid de Viena. Con la anexión de Austria a Alemania, el Rapid pasó a competir en las competiciones alemanas de forma asidua.
Tras conquistar la Copa alemana en 1938, la siguiente empresa parecía más complicada: ganar la Bundesliga. Cabe decir que en aquella época (hasta la temporada 63-64), la Bundesliga tenía un formato más parecido a la Champions actual, donde se formaban diversos grupos según los «Gaus» o regiones y los ganadores de cada Gaus accedían a otra segunda fase formada también por diversos equipos para finalmente clasificarse a semifinales y la gran final.Pero todo fue cuestión de tiempo y el club de la ahora capital austriaca demostró ser más fuerte en la final disputada en Berlin y en la que venció al Schalke 04 por 4-3 después de remontar una desventaja de tres tantos. Una hazaña que parece difícil, casi imposible que se vuelva a repetir.
