Última actualización 30 mayo, 2023 por Alberto Llopis
Wilfred Agbonavbare fue el portero del Rayo Vallecano durante gran parte de la década de los 90´s. Un clásico del fútbol de la infancia de muchos de los treintañeros de hoy en día. Fue uno de esos jugadores que destacaban más por su entrega que por su talento, pero que a pesar de todo no era mal portero. Un jugador de perfil luchador y humilde de los que tanto abundaban en el fútbol de antaño. Y de los que dejó huella. Porque fue uno de los jugadores más carismáticos de su época.
Eterno Wilfred
Llegó al Rayo en 1990 y se mantuvo durante seis temporadas defendiendo el arco de Vallecas. No tuvo unos inicios fáciles en el mundo del fútbol. Debutó con tan sólo 18 años en la selección de Nigeria y la cosa no le fue nada bien. Le metieron cinco goles y como suele ser en estos casos, le colgaron el cartel de cantarín. Este hecho le costó no volver a ser seleccionado hasta diez años después.
Fue al Mundial de USA en 1994 gracias a sus actuaciones sobre el césped del estadio de Vallecas. Con su aspecto peculiar, su cara redonda y su peculiar bigote, se ganó a la afición con sus paradas, humildad y trabajo. Después se marchó al Écija donde acabó como profesional en la temporada 1996-97 en Segunda División.
Wilfred tuvo que vivir de cerca el racismo y el fenómeno ultra de los años 90 y por desgracia, vivió en primera persona tardes como una en el Bernabéu a mediados de los 90. Pero Willy como siempre lo afrontaba todo con humildad y grandeza.
Hoy se cumplen 8 años que nos dejó Wilfred. Incluso en días tan vergonzosos y deleznables como el de este vídeo, dio una lección de vida
— Colgadosporelfutbol® (@colgadosfutbol) January 27, 2023
Aparición en el ‘Jefe infiltrado’ y muerte
En 2012 volvió a pisar el césped de Vallecas para recibir un merecido homenaje y lo último que se supo de él hasta su enfermedad, era que a pesar de haber estado en un Mundial y haber jugado muchos años en Primera División, estaba trabajando como repartidor para una empresa de transportes por las afueras de Madrid. Wilfred llegó incluso a salir en el programa «El Jefe infiltrado» en su versión española.
Tristemente, el 27 de enero de 2015, se conoció que el nigeriano estaba gravemente enfermo de un cáncer que se lo llevó para siempre pocos días después de hacerse público. Sin duda un triste final para uno de esos jugadores de antaño que siempre quedan en la memoria de los aficionados al fútbol.