Última actualización 19 noviembre, 2023 por Alberto Llopis
España posee un envidiable palmarés internacional. Campeona Mundial en 2010, suyas son también dos Eurocopas y un oro olímpico, además de dos platas. Sin embargo, durante mucho tiempo y en muchos partidos hubieron una serie de elementos que condicionaban los encuentros de forma negativa. Mala puntería, despistes, errores garrafales, polémicas actuaciones arbitrales. El caso es que fueron no pocos los años de pesadillas para los seguidores del fútbol español.
Como no tiempo pasado siempre fue mejor y pensando en que la próxima cita mundialista siga la senda victoriosa iniciada en 2008, en Colgados por el Fútbol recordamos los diez momentos más amargos de la historia de la selección en las grandes citas internacionales: ¿Para ti, cuál fue peor?
1- España-Italia, Mundial de 1934.
Una final anticipada que hubo de jugarse dos veces en días sucesivos porque el primer partido acabó con empate a uno después de que siete jugadores españoles acabaran lesionados por la dureza permitida a los italianos. Con un equipo lleno de bajas y dos goles anulados a Regueiro, España sufría su primera gran derrota internacional, injusta a todas luces. En la imagen, la famosa falta a Nogués que supuso el triunfo italiano por un 1-0 en el desempate. En el vídeo, espectaculares imágenes de aquel encuentro (una delicia ver como se jugaba entonces).
2- España-Brasil, Mundial de 1978:
Fue el más difícil todavía. España acabaría eliminada en la primera fase por culpa de errores tan incomprensibles como el gol de Cardeñosa. Irónica forma de llamar a la jugada que nunca debió ocurrir. Con todo a favor, el portero ya superado, el español no supo superar a unos defensas ya batidos. El balón fue a ellos, no los defensas a él.
3- España-Francia, final Eurocopa 1984:
Hubieron de pasar seis años para ver otro error garrafal de un jugador, en este caso portero, español. Fue Luis Miguel Arconada, uno de los mejores guardametas del mundo, quien en la final contra Francia no iba a tener su mejor día. Una falta lanzada por Platini aparentemente inofensiva se coló por debajo de sus brazos para desesperación de sus compañeros y alegría de sus rivales.
4- España-Bélgica, cuartos de final del Mundial de 1986:
España venía con la inercia de haber goleado a Dinamarca por 5-1 en una noche mágica del Buitre. Todo era favorable para medirse con una Argentina que temía a un combinado que bordaba el fútbol y tenía gol. Pero entre medias, anduvo una Bélgica que ganó en los penaltis con error de Eloy Olalla de por medio. Una gran oportunidad perdida.
5- España- Yugoslavia, octavos de final del Mundial de 1990:
Con empate a uno se llegó a la prórroga contra la ya extinta Yugoslavia que tenía fenomenales jugadores. Uno de ellos era Stojković que en un lanzamiento de falta decidió el encuentro. El problema estuvo ya no sólo en el maravilloso golpeo de balón del serbio, sino en que Michel pareció retirarse de la barrera y facilitar el hueco para que el balón entrara. Intencionadamente o no, esa leyenda siempre acompañará al exmadridista.
6- España-Italia, cuartos de final del Mundial de 1994:
La década de los 90 fue movidita para la Roja. Cuartos de final y de nuevo Italia. Mal presagio. Dino Baggio abrió el marcador con un excelente golazo de fuera del área que neutralizó Caminero. Fue entonces, en pleno dominio Español, cuando Julio Salinas la tuvo contra Pagliuca en el último minuto de partido en un uno para uno de infausto recuerdo. La falló y claro, quien perdona, pierde. Roberto Baggio a la siguiente jugada marcó el definitivo 1-2. En pleno descuento aún pudo salvarse la papeleta pero el colegiado húngaro Sandor Puhl no vio un claro codazo de Tasotti a Luis Enrique.
7- España-Inglaterra, cuartos de final de la Eurocopa 1996:
Inglaterra era la anfitriona de aquel campeonato. El partido debía disputarse en Wembley. Marco incomparable. España dominó el partido con una alineación atípica compuesta por jugadores defensivos pero potentes. Kiko ponía el arte arriba y el gol. Lo marcó, pero se anularon de forma increíble por un fuera de juego que nunca existió. La tanda de penaltis dictó sentencia. El portero era Zubizarreta. El desenlace ya lo saben.
8- España-Francia, cuartos de final de la Eurocopa 2000:
Otra vez los malditos cuartos iban a ser una barrera insalvable. España llegaba al último minuto con desventaja de 2-1 pero un penalti abría la puerta a la ilusión. Sin Mendieta ya en el campo (que había transformado el primer penalti pitada a los españoles), el gran capitán debía asumir el reto de batir a Barthez, un guardameta no especialmente hábil en parar penas máximas. No la paró. No hizo falta. Raúl buscó la escuadra y encontró las nubes.
9- España-Camerún, final Juegos Olímpicos 2000:
España partía favorita contra una Camerún liderada por Eto’o. Xavi, Aranzubia, Gabri, Ángulo o Puyol eran mucho para unos africanos que buscaban su primer oro. Todo parecía fácil. Xavi en el minuto 1 marcó de falta y en el diez el resultado era de 2-0 y penalti a favor. El desenlace todo el contrario. Por penaltis, plata.
10- España-Corea, cuartos de final del Mundial 2002:
En muchas citas han eliminado a España los equipos locales amparados en decisiones muy polémicas. Corea no iba a ser la excepción. Venía avisada España después de la mano echada a los asiáticos contra Italia en octavos. Dio igual. Los de Camacho marcaron dos goles, todos válidos, ninguno subió al marcador. Un egipcio se encargó de ello. Luego vino la tanda de penaltis y eran tiempos donde la suerte no estaba del lado español.