Última actualización 25 marzo, 2022 por Alberto Llopis
La Italia de USA 94 estuvo a punto de rozar la gloria. El Mundial americano suponía un lavado de cara para una Italia que venía desolada tras el fiasco de no haber ganado en su país el título de 1990. Cuatro años tuvieron que pasar, después de que la Unión Soviética le privara de participar en la Eurocopa de 1992, para que la Nazzionale estuviera de regreso en la competición. Esta vez con más ansias que nunca de ganar y bajo el mando de Arrigo Sacchi. Entrenador de un Milán que por aquel entonces había logrado tres Copas de Europa en los cursos previos (1988-89, 1989-90, 1993-94) y que tendría gran representación en ese Mundial del ‘94.
La subcampeona del Mundial de USA 94
Italia redebutaba en la Copa del Mundo en 1994 frente a Irlanda. Un partido del grupo E que ganarían sorpresivamente los irlandeses gracias a un gol de Ray Houghton en el minuto once de la primera parte.
Una derrota que supuso que en el siguiente encuentro Italia se jugase la vida para pasar a la segunda ronda, y lo haría enfrentándose a Noruega. Un choque que también se saldaría por la mínima diferencia, pero esta vez favorable para los italianos gracias al tanto que anotaría en el 69’ Dino Baggio.
De esta forma, Italia se clasificaba para el siguiente partido, que sería contra México. Un encuentro que comenzarían ganando los de Arrigo Sacchi gracias a un gol de Daniele Massaro. Yéndose así al descanso rozando la victoria. Sin embargo, el regreso al campo se dificultó y en el minuto 57, México asestaría el tanto del empate.
Con este resultado en el grupo E se dio una peculiaridad y es que todos terminaron con la misma cantidad de puntos: cuatro (y con la misma diferencia de gol, cuatro puntos cero con la diferencia de gol para todos). Por lo que, finalmente, fue Noruega la que terminó quedando fuera ya que solo había convertido un gol y le habían convertido un tanto. Se clasificaron así México, Irlanda e Italia.
Para los octavos de final, el rival de Italia sería Nigeria. Un equipo africano encendido que comenzó ganando con gol de Emmanuel Amunike en el 26’ de la primera parte y que parecía no apagarse. El sueño de Italia parecía esfumarse, pero en apenas 10 minutos todo cambió. En el 89’ Roberto Baggio marcó el empate que les llevaría a prórroga, y en el alargue, en el minuto 100, patearía el penalti que sentenciaba el 2-1. Un gran día para el pichichi del equipo.
En cuartos de final el rival sería España. El partido comenzaría ganándolo la azzurra con gol de Dino Baggio, pero poco les duraría la alegría ya que José Luis caminero pondría el empate al comienzo de la segunda mitad. Se iban al alargue una vez más, pero ahí estaba, también una vez más, Roberto Baggio, que marcaría el desempate a tres minutos del final.
La Copa estaba cada vez más cerca e Italia se plantaba en semifinales ante la Bulgaria de Stoichkov, Letchkov, Kostadinov, Trifon Ivanov y compañía. Un partido muy relajado para los italianos, sobre todo en la primera parte tras el gol del de siempre, de Roberto Baggio, en el 20’. Un tanto que se convertiría en doblete cinco minutos después. Los búlgaros intentaron despertar en las siguientes jugadas, y parecían hacerlo tras el penalti que acertaba Hristo Stoichkov en el 44’, pero el crono corría y el marcador terminó con un 2 a 1 para la azzurra.
Italia llegaba así por cuarta vez a una final de la Copa del Mundo. Volvía al partido definitivo en una final que sería contra Brasil. Una Brasil de Carlos Alberto Parreira, contra la que la azzurra ya se había topado 24 años atrás, en México 70. Un partido que terminó por primera vez en la historia sin goles y decidiéndose en la tanda de penaltis.
El resultado lo tenía en los pies el héroe de aquella selección del Mundial del 94’, Roberto Baggio, por lo que nada parecía preocupar a la Squadra Azzurra. Se desconoce si ese día el 10 había pasado por debajo de una escalera o se había cruzado con un gato negro, pero lo cierto es que ese zapatazo decisivo se fue por encima de la portería dejando el marcador 3-2 a favor de la canarinha. Un descuido que terminaría por coronar a la Selección de Brasil tetracampeona de la Copa del Mundo en el Rose Bowl de Pasadena.
Pasando lista
Pese a aquel fallo garrafal, Roberto Baggio fue considerado el Moisés del 94’ tras convertirse en el goleador de aquella selección con cinco tantos en siete partidos. Aunque también cabe resaltar otros nombres propios como el de Dino Baggio o Daniele Massaro.
Pero sin duda, lo que llamó la atención del mundo de aquella selección de Italia del 94’ fue la numeración. Es común encontrar numeraciones del dos al once en porteros o defensas con números de jugadores de ataque, pero que toda una selección lleve números que descoloquen a periodistas, aficionados y rivales es algo inusual. Algo utópico, pero que ciertamente haría Arrigo Sacchi al colocar por orden de lista a los jugadores, algo así como en el colegio.
Los tres porteros con los que contó la selección lucieron el 1,12 y 22 por orden de jerarquía. El capitán el 6, y la estrella del equipo el 10. Al resto de jugadores se les asignaría el dorsal por orden de posición y de apellido.
La plantilla de la Italia de USA 94
PORTEROS:
1 Gianluca Pagliuca
12 Luca Marchegiani
22 Luca Bucci
DEFENSAS:
2 Luigi Apolloni
3 Antonio Benarrivo
4 Alessandro Costacurta
5 Paolo Maldini
6 Franco Baresi
7 Lorenzo Minotti
8 Roberto Mussi
9 Mauro Tassotti
CENTROCAMPISTAS:
11 Demetrio Albertini
13 Dino Baggio
14 Nicola Berti
15 Antonio Conte
16 Roberto Donadoni
17 Alberigo Evani
DELANTEROS:
10 Roberto Baggio
18 Pierluigi Casiraghi
19 Daniele Massaro
20 Giuseppe Signori
21 Gianfranco Zola